CRISTO Y KRISHNA, AVATARES DE LA VERDAD ÚNICA
Un Maestro es un ser cuya conciencia se ha purificado para poder recibir y reflejar en forma perfecta la luz de Dios. El sol brilla con igual intensidad tanto sobre el carbón como sobre el diamante, pero solo éste último refleja dicha luz. Igualmente, la luz del Señor se derrama sobre todos los seres vivientes, pero algunos la reflejan en mayor grado que otros. Y es así como en el hombre dotado de realización espiritual, la luz divina se encuentra reflejada en su plenitud.
Todo ser humano es un alma envuelta en el velo de maya. A través de la evolución y del esfuerzo personal, el alma abre un pequeño orificio en dicho velo, un orificio que va creciendo progresivamente. A medida que dicha abertura se agranda, la conciencia se expande y el alma se manifiesta en forma más plena. Finalmente, cuando el velo se destruye completamente en un hombre, éste se convierte en un «maestro», es decir en el amo de sí mismo y de maya.