EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL SURGE DEL ESFUERZO DIARIO DE CAMBIARNOS A NOSOTROS MISMOS

EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL SURGE DEL ESFUERZO DIARIO DE CAMBIARNOS A NOSOTROS MISMOS

Así es como nosotros cambiamos. No tenemos que permanecer como estamos; no necesitamos convertirnos en “muebles psicológicos”, como Paramahansaji solía decir. Los muebles nunca cambian. Si estuviera en su forma original, crecería y produciría, pero cuando es transformado en una silla o en una mesa deja de mejorar. Ya sólo se hace viejo, se deteriora y desmorona.

Para crecer espiritualmente hay que estar intentando constantemente cambiarnos a nosotros mismos. La espiritualidad no es algo que pueda injertarse a nosotros desde fuera – como un “halo” que pudiéramos modelar y poner en nuestras cabezas-. Proviene de un continuo y paciente esfuerzo día a día y de un relajado sentido de entrega a la Divinidad. No es que repentinamente la Luz de Dios descienda sobre nosotros y nos convierta instantáneamente en unos santos. No; es nuestro esfuerzo diario por cambiarnos a nosotros mismos y de entregar nuestro corazón, mente y alma a Dios, en la meditación y en la actividad.

Donde sea que Dios te haya colocado, haz lo mejor que puedas para manifestar un espíritu positivo, la fuerza interior de tu mente, y un sentido de fe y confianza y entrega a Sus pies. Es tan simple conocer a Dios; simplemente déjalo ir y permítele a Él entrar en tu vida. Este es el gran propósito del camino espiritual.

Acepta cada experiencia que llega a tu vida como si viniera de Él, y trata de aprender de ella.

[…] No permanezcas como la misma vieja “antigüedad psicológica”; utiliza el poder de Dios que hay dentro de ti para cambiar tu vida. Allí radica la liberad total de las limitaciones del cuerpo, mente y de este mundo de ilusión. Allí radica la suprema victoria para todos nosotros.

Sri Daya Mata. Libro «Intuición: guía del alma para tomar decisiones acertadas». Pág 64

Compartir en